Al otro género


Ha olvidado todos aquellos nombres que empezaban por A, las referencias al cine clásico, las horas esperando... -el tiempo no nos espera, irrisorio, implacable....tiempo-. 
"Erguido, camina conmigo", se dice. Pero la memoria es este sexo que no olvida, ni las trampas, ni la idas y venidas. Cuando ella olvida algo también de mí lo hace, no es extraño, ni doloroso; es anestésico, como una herida que jamás se cerró y a la vez nos pica.
Ella ha olvidado como era el remordimiento, robarse a sí misma, mentirse a sí misma. En esta habitación tiene todos sus reproches. Una caja llena de libros, otros tantos que son suyos... sentir que nada le pertenece -nada nace tan fuerte en ella como la nada-. 
"Libre, tan libre", se dice. Pero la lluvia ya ha caído y la ventana tiene motas de polvo. Irremediablemente todo acaba cayendo, una lágrima en sus mejillas, una mano en su pecho...un suspiro. Siempre amaneciendo.